Estos días hemos amanecido con la noticia de que Álvaro Llompart, excontable de UM, recibe amenazas de muerte para que se mantenga en silencio y cese su colaboración con la Fiscalía Anticorrupción. Según la prensa, a ello le ha precedido una campaña mediática para desacreditar su figura (vid. Diario de Mallorca 27-7-2012, pág. 7).
No es el primer caso ni el último. La “isla de la calma” es la isla donde periodistas de tribunales y fiscales anticorrupción son amenazados. Donde jueces que instruyen causas por corrupción y fiscales son investigados privadamente a costa de personas que querrían se perpetuara su impunidad, con el fin de desacreditarlos. Donde testigos o coimputados reciben “sugerencias” sobre el abogado que han de tener, o lo que han de declarar cuando acudan al juzgado. Mallorca, señores, es tierra de mafia, porque estas son las estrategias que hoy día utiliza una mafia que ya no recurre a delitos de sangre más que en último término.
Invitamos al Sr. Llompart a denunciar esas amenazas y a permitir una investigación. Es hora de romper el silencio y mostrar el verdadero rostro de los corruptos, mucho más que meros “delincuentes de cuello blanco”.